miércoles, 24 de agosto de 2011

¡UNIVERSITARIOS, UNÍOS!

EL CORREO ILUSTRADO de La Jornada-Jalisco

Jaime Arias Amaral

Inicia un nuevo ciclo escolar en nuestra universidad y un fantasma recorre nuestra alma máter, el fantasma de la inconformidad y deseo de cambio real en ella, encabezado por el Colectivo Reflexión Universitaria, que convocan al foro denominado ¿Qué universidad tenemos? ¿Qué universidad queremos?, a realizarse el 25 y 26 de agosto próximos en el en el Auditorio Silvano Barba del CUCSH, y que tiene como objetivo realizar un diagnóstico de la situación de nuestra casa de estudios para convertirla en un espacio con mayor apertura, transparencia, democracia e inclusión.
Este intento de cambio que afortunadamente surge de la base académica y no de la misma élite del poder, ojalá ahora sí impacte en la comunidad universitaria. Esto nos debe inducir a los más de 200 mil elementos (académicos, estudiantes, administrativos y trabajadores) que pertenecemos a esta institución, a un proceso de reflexión, debate y discusión, acerca del manejo corporativo-autoritario al que ha estado sometida la Universidad desde hace varias décadas.
Que el Consejo General Universitario, máxima autoridad formal en nuestra institución, sea verdaderamente representante de la comunidad a la que pertenecemos y no solamente unos levantadedos de acuerdo a la línea que marcan sus “líderes” y máxime ahora que el nuevo consejo que se elija decidirá al próximo rector general.
Exigir a nuestras autoridades que exista una verdadera transparencia y rendición de cuentas en el manejo de los recursos públicos que manejan, y se discuta si es ético lo de los funcionarios “dobleteros” y los sueldos y prestaciones de las autoridades.
Exigir que se deje de financiar con dinero de nuestra Universidad a las empresas “culturales” del Licenciado, y dirigirnos a las funciones sustantivas de nuestra casa de estudios.
Exigir los docentes un salario digno y no estar mendigando cada año papelitos para cumplir con los requisitos de los diversos programas de estímulos, de la misma forma que el personal administrativo y trabajadores ganen lo justo.
Exigir una profesionalización pero en serio de la carrera docente de nuestra Universidad.
Exigir que nuestros representantes sindicales actúen en consecuencia con sus agremiados y no solamente respondan a la línea del Licenciado.
En fin, es una oportunidad de exigir una verdadera democratización en todos los sentidos de nuestra Universidad y no solamente ver nuestros intereses particulares, es el momento que todos los elementos que conformamos esta comunidad deberemos contribuir a cambiar la realidad imperante hoy, todos tenemos una responsabilidad y por ello debemos participar con nuestras ideas y reflexiones. No nos dejemos intimidar por las autoridades que han tomado a la Universidad como un patrimonio personal para sus intereses particulares y de grupo y en favor del Licenciado, será la mejor lección del semestre para nuestros alumnos y la sociedad.

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