Jairo Calixto Albarrán
Gracias a la sobredosis de pozole, fue posible pasar uno de los Gritos de Independencia más aburridos y sin gracia de los últimos años. Y no sólo fue triste y grisáceo por la propia situación nacional que no da para ponerse efusivo ni patriota —como que ya nos dimos cuenta de que esto no es simple bullying como nos quisieron hacer creer—
, sino porque nadie exaltó la elegancia y glamour que le puso al asunto Margarita Zavala. Luego de cuatro años de críticas hacia su elección de vestimenta, finalmente consigue el outfit perfecto y nadie lo celebró como es debido.
Justo en la batalla entre la Toluca y Los Pinos, se tendría que haber subrayado la manera en que Margarita apabulló a La Gaviota que, contagiada por el triunfalismo de su marido, ya no le echa tantas ganas como antes.
Debe ser un compló, porque en vez de abismarnos en cosas fundamentales, nos distraemos fácilmente: las peleas del Canelo que, a pesar de su naturaleza inflada, ganan en morbo; el incierto destino del equipo América, que cada vez se parece a las peores telenovelas de Televisa; el hallazgo del cuerpo del diputado 500, como demostración que sólo México es bello; el apañón de La Flaka, quien pasara de policía modelo a representante del empoderamiento femenino en los altos niveles del crimen organizado al revelarse su papel de mera mera en la plaza regia de Los Zetas. En este cártel hay más posibilidades de desarrollo para las mujeres que en muchas empresas e instituciones públicas y privadas.
Bueno, tampoco en el PAN contribuyeron a dejar claridad en el ambiente: continuaron el jaloneo con el edil Larrazabal que, sin duda, ha logrado lo que parecía imposible, superar a Molinar Horcasitas, el héroe de la guardería ABC, en lo que a aferrarse al hueso se refiere. También la incapacidad de reacción de los blanquiazules: en vez de convocar a un debate expedito entre sus suspirantes para definir la candidatura, quieren esperar a que los del PRIcámbrico les saquen más ventaja. Así, ni aunque manden a Moreira al tambo, van a dar la batalla.
Ya en el colmo, el poeta Sicilia también jaló marca. Primero con el fallido paso por Guatemala, cuya frontera es laxa para todo, menos para caravanas por la paz; luego con el malogrado encuentro con el Sup Marcos, quien seguramente estaba en Las Vegas aplaudiendo los shows de 15 de septiembre de Luis Miguel y El Potrillo. Y ya en el colmo, el accidentado recorrido con emboscadas, amenazas, persecuciones y detenciones incluidas.
Así no se puede. Y cuando el Conapred podría apoyar en esto, pierde miserablemente el tiempo persiguiendo a Anahí por ser una nena y no un macho. Chale.
Gracias al pozole y a los Pumas.
www.twitter.com/jairocalixto
, sino porque nadie exaltó la elegancia y glamour que le puso al asunto Margarita Zavala. Luego de cuatro años de críticas hacia su elección de vestimenta, finalmente consigue el outfit perfecto y nadie lo celebró como es debido.
Justo en la batalla entre la Toluca y Los Pinos, se tendría que haber subrayado la manera en que Margarita apabulló a La Gaviota que, contagiada por el triunfalismo de su marido, ya no le echa tantas ganas como antes.
Debe ser un compló, porque en vez de abismarnos en cosas fundamentales, nos distraemos fácilmente: las peleas del Canelo que, a pesar de su naturaleza inflada, ganan en morbo; el incierto destino del equipo América, que cada vez se parece a las peores telenovelas de Televisa; el hallazgo del cuerpo del diputado 500, como demostración que sólo México es bello; el apañón de La Flaka, quien pasara de policía modelo a representante del empoderamiento femenino en los altos niveles del crimen organizado al revelarse su papel de mera mera en la plaza regia de Los Zetas. En este cártel hay más posibilidades de desarrollo para las mujeres que en muchas empresas e instituciones públicas y privadas.
Bueno, tampoco en el PAN contribuyeron a dejar claridad en el ambiente: continuaron el jaloneo con el edil Larrazabal que, sin duda, ha logrado lo que parecía imposible, superar a Molinar Horcasitas, el héroe de la guardería ABC, en lo que a aferrarse al hueso se refiere. También la incapacidad de reacción de los blanquiazules: en vez de convocar a un debate expedito entre sus suspirantes para definir la candidatura, quieren esperar a que los del PRIcámbrico les saquen más ventaja. Así, ni aunque manden a Moreira al tambo, van a dar la batalla.
Ya en el colmo, el poeta Sicilia también jaló marca. Primero con el fallido paso por Guatemala, cuya frontera es laxa para todo, menos para caravanas por la paz; luego con el malogrado encuentro con el Sup Marcos, quien seguramente estaba en Las Vegas aplaudiendo los shows de 15 de septiembre de Luis Miguel y El Potrillo. Y ya en el colmo, el accidentado recorrido con emboscadas, amenazas, persecuciones y detenciones incluidas.
Así no se puede. Y cuando el Conapred podría apoyar en esto, pierde miserablemente el tiempo persiguiendo a Anahí por ser una nena y no un macho. Chale.
Gracias al pozole y a los Pumas.
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