lunes, 16 de agosto de 2010

Conozco, aprecio y respeto a los Calderón, pero apoyo a AMLO

Natalia Colmenares (@natcolmenares)

16 de August, 2010 - 00:11 | 26 comentarios

Escribo esta columna con la intención de acercarme a ustedes, personas que me leen y que pueden estar o no de acuerdo conmigo. Mi texto hoy es dedicado al que pueda leerlo con el deseo de que mi experiencia, como quiera que sea, le sirva de algo.

Eventos aislados en mi historia personal me han motivado a escribir en SDPnoticias.com con la intención de buscar un mejor país y de acercarme a personas que, como yo, están preocupadas por una nación en declarada guerra perdida.

Mi deseo de buscar mejores oportunidades para mí y para los míos surge de una situación de vida que por años ya me pesa como mamá joven y divorciada. Todo parte de un profundo deseo de lograr esa tranquilidad y estabilidad (que los mexicanos no tenemos) para poderla transmitir a mis hijos con la idea de que la vida es algo que sí se puede disfrutar. Pero la realidad es otra, que casi todos tenemos que trabajar para comer, y nada más. Y a veces ni trabajo hay en México.

¿Por qué escribo? Porque me gusta y porque siempre lo he hecho. En mi familia cercana hay directivos y propietarios de editoriales reconocidas y entre mis trabajos anteriores he colaborado en la corrección de libros.

Conozco bien a Margarita Zavala y a Felipe Calderón. Por circunstancias y coincidencias de vida, he estado relativamente "cerca" de ellos y de su familia desde hace 5 años. De mi parte siempre ha existido afecto y aprecio por ambos y por uno de sus hijos en especial, Juan Pablo. Ese cariño y amistad no cambia. Les considero personas honestas y preparadas. Lo que con ellos he tenido oportunidad de compartir ha sido siempre en compañía de su familia y la mía, cosa que Margarita sabe, siempre he agradecido.

He tenido también la oportunidad de conocer al señor Andrés Manuel López Obrador. He platicado con él más de un par de veces que me han bastado para acercarme más a su movimiento, con el que me identifico por razones de puro y básico sentido común. Después de haber leído su libro "La mafia que se adueño de México... y el 2012" no pude más que sentirme conmovida al mirar alrededor mío. Lo que yo encuentro en la calle es miseria. Lo que yo veo en la gente es desesperanza. Lo que yo percibo de mi país es una colectiva resignación a que las cosas son así y no pueden ser de ninguna otra forma. No tenemos las armas para levantarnos; y con esto me refiero a lo que por derecho, debiéramos tener acceso todos los mexicanos: salud, educación, transporte, seguridad, oportunidades de empleo, remuneraciones dignas.

Nada más por eso me siento obligada a decir franca y abiertamente que no solo ES POSIBLE que Andrés Manuel López Obrador sea Presidente, sino que es NECESARIO.

Puedo usar como base de mi personal punto de vista un solo argumento, pues no pienso extender mis ideas a algo ya expuesto por el mismo López Obrador en su libro y en el Proyecto Alternativo de Nación, que hablan y se entienden por sí solos. El punto que más me acerca al movimiento es el hecho de que a López Obrador se le combata tanto solo por decir que todos los empresarios deben pagar impuestos. Este es un motivo más que suficiente para entender por qué le ha sido tan ardua la lucha y "resistencia" que López Obrador dignamente sigue encabezando con la intención de lograr un bien mayor.

No soy ni nunca he sido de izquierda. Si he votado en otras elecciones, ha sido a favor del PAN. Mis amigos son casi todos panistas y mi familia es priista. Como mencioné, hasta he tenido el privilegio de haber convivido con Margarita Zavala y Felipe Calderón, dos personas que respeto y aprecio. Si las cosas fueran distintas, si la democracia mexicana fuera un hecho incontrovertible, sin pensarlo le daría en 2012 mi voto al PAN, con cuyos principios me identifico más que con los del PRD, PT o Convergencia.

Pero México es lo que es y no otra cosa: hay guerra, hay crisis, no existen oportunidades de desarrollo. Y nuestra democracia es débil, cuando no inexistente. Por tales razones, no daré mi voto al partido con el que me identifico porque me ha decepcionado, sino a una izquierda en cuya modernización espero poner un simple grano de arena si me lo permiten.

Con orgullo afirmo que, a pesar de múltiples diferencias ideológicas, apoyaré la candidatura a la Presidencia de Andrés Manuel López Obrador para el 2012.  Ojalá AMLO, si llega al poder con el apoyo de millones en mi situación, no nos decepcione

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