Atotovive

26/10/2010 - 00:10

Por: Claudia Rodríguez Ya esta Acta Pública, el día de ayer, daba cuenta de cómo era iluso no predecir que el decomiso de mercancías ilegales en grandes cantidades constituía por ende, un fuerte golpe al crimen organizado y que nadie pensaría que los afectados --aunque delincuentes--, se quedarían con las manos cruzadas.

Luego de que el fin de semana fue más que sangriento, en Tamaulipas, Nuevo León pero también en Chihuahua y Baja California de forma muy sonada en estas dos entidades por las matanzas en Ciudad Juárez y Tijuana, asusta que aún el procurador Rommel Moreno Manjarrez de Baja California señale que luego de la masacre en un centro de rehabilitación tijuanense, se siga como línea de investigación el millonario decomiso de droga de la semana anterior.

Imagino entonces, que luego del confisco de alrededor de 130 toneladas de marihuana, en la misma Tijuana, las autoridades procedieron a su quema y a la divulgación de la misma empresa  y se sentaron a aplaudirse y que quizá a esperar se les aplaudiera, pero no siguieron la pista a los criminales que pensaban poner esa cantidad de droga en el mercado.

Más que líneas de investigación, todo lo que sucede con las acciones en contra de la delincuencia organizada se quedan en cabos sueltos.

En México, no todos los crímenes se denuncian o se tasan como tales y de los que llegan a instancias de la justicia, no todos se resuelven en sentencia criminal.

Sabemos que en las cárceles mexicanas hay miles de internos que no han cometido ningún crimen, o que bien, pasan años sin que se les dicte sentencia.

La investigación y el accionar expedito de la justicia son para quienes tienen recursos económicos, al igual que la protección del crimen y de las consecuencias por la inseguridad.

Mal queda el señor procurador de Baja California, Moreno Manjarrez, al señalar que el decomiso de toneladas de droga por parte de las autoridades podría ser la causa de trece acribillados en Tijuana, lo cual deja en claro que el trabajo de coordinación policiaca en contra del crimen organizado, deja mucho que desear.

¿Qué hay de los 11 detenidos en Tijuana, tras el enfrentamiento entre policías y narcotraficantes que al parecer fue lo que dio lugar al decomiso de más de 10 mil paquete de marihuana con un valor de 4 mil 200 millones de pesos?
Si la coordinación policiaca fuera tal, habría más detenciones que crímenes.  ¿O no?

Acta Divina…  La semana anterior, el presidente Felipe Calderón  felicitó a las Fuerzas Armadas y, en especial, al Ejército Mexicano, a las autoridades federales y locales por el decomiso de 105 toneladas de mariguana en Tijuana, Baja California.  El mandatario dejó en claro que se trata del mayor decomiso en la historia de México “y significa, desde luego, un muy duro golpe a las estructuras financieras del crimen organizado en nuestro país”.