Medidas cautelares para proteger a la reportera Adriana Luna: CEDHJ
La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco emitió medidas cautelares a favor de la reportera Adriana Luna, su esposo y el domicilio que ambos comparten, de acuerdo al acta 9382/2010, luego de que el sábado, durante la ceremonia luctuosa de nueve policías estatales acribillados en Jilotlán de los Dolores, el secretario de Seguridad Pública de Jalisco, Luis Carlos Nájera, la acusó de dar más voz a los delincuentes que a las autoridades.
Luna, corresponsal de Excélsior y Grupo Imagen en Jalisco, cuestionó en ese acto al secretario de Seguridad Pública de Jalisco acerca de versiones que circularon en Michoacán y en la Ciudad de México respecto a que el convoy de 20 policías estatales que fue emboscado por un grupo de al menos 50 sicarios presuntamente de La Resistencia, custodiaba al sucesor de Nacho Coronel.
Visiblemente molesto, Nájera increpó a la reportera: “Hay sobrevivientes, ahorita te los traigo y a los familiares para que les digas que los mataron por delincuentes. Son versiones de los delincuentes, que muchas veces ustedes les dan voz más que a las autoridades, no es válido. Te pongo en la mesa una cosa, los mandamos al polígrafo, si ellos estaban escoltando a un delincuente los consigno a todos, y si no es así tú presentas tu renuncia porque no tienes, digo, por qué darle voz a delincuentes. Esa pregunta no vale, no es para limpiar el nombre, esa pregunta es para mancharlos más, trae jiribilla y esa pregunta viene dirigida de los delincuentes que muchos, mucha gente protegen y les dan más voz”.
Luna cuenta que después de la entrevista (La Jornada, 31 de noviembre), se acercó a Nájera para explicarle que la pregunta que hizo fue a solicitud informativa de los medios para los que trabaja. El funcionario pareció no escuchar lo que le decía la corresponsal y aparentemente se marchó, pero minutos después regresó para advertirle, fuera de grabación: “Voy a actuar contra Moisés Mora (esposo de Luna)”. Mora fue hasta hace dos años vocero del Consejo de Seguridad Pública de Jalisco.
La reportera fue llamada por la CEDHJ, que inició una queja por su lado y ratificó lo sucedido, que será investigado por la segunda visitaduría. Las medidas cautelares incluyen, además de su persona, de su marido y su domicilio, el respeto a la labor periodística
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