lunes, 21 de noviembre de 2011

LA LECCIÓN DE LA IZQUIERDA MEXICANA

SATIRICOSAS 

 Manú Dornbierer 
Desde el comienzo de su historia la humanidad evoluciona trabajando para lograr una vida mejor. A pesar de los avances hoy se utiliza el poder y la fuerza económica y tecnológica ( y política, me permito agregar) para asesinar, empobrecer y oprimir en vastas regiones del mundo, destruyendo además el futuro de las nuevas generaciones y el equilibrio general de la vida en el planeta. Un pequeño porcentaje de la humanidad posee grandes riquezas mientras las mayorías padecen serias necesidades. En
algunos lugares hay trabajo y remuneración suficiente, pero en otros la situación es desastrosa. En todas partes los sectores más humildes sufren horrores para no morirse de hambre. Silo (Mario Luis Rodríguez Cobos[ ]6-1-38 /16-9-10), [] escritor argentino fundador del Movimiento Humanista.
Sin embargo, esta semana en México sucedió algo que en lo personal me hace recuperar un poco de fé en estas últimas generaciones de humanos contaminadas más que nunca con los siempre inmorales virus del neoliberalismo _ le llamen como le llamen cuando brota como devastadora erupción_ y en esta época más destructivos que nunca pues producen constantes y devastadoras guerras de todo tipo además de hambrunas, miseria generalizada y tremendo deterioro del planeta.
Han llevado al mundo al innegable hecho de que el poder y el dinero pertenecen en exclusiva a una muy pequeña minoría de seres humanos, en tanto que miles de millones son esclavos que padecen en mayor o menor medida los males a los que se refiere Silo y que están inspirando hoy por hoy la protesta mundial de Los Indignados. Esos que han (hemos) entendido que los “ conservadores”, la Derecha en cualquier parte del Globo,  también en mayor o menor medida, lo único que realmente quieren conservar son sus inmensos privilegios.
La lección de limpieza democrática, de fairplay que Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard Casaubon le acaban de brindar a México significa una auténtica oportunidad de rescatar la política mexicana que cayó desde hace mucho en la sordidez, en la perpetua mentira, en el entreguismoy hasta en el genocidio. Se dice fácil, pero la tontería demoledora con que han gobernado las administraciones neoliberales desde 1982 en adelante sólo podrá empezar a repararse desde acciones de una izquierda higienizada y en verdad respetuosa de una mayoría informada entre la que sobresale el Movimiento de Regeneración Nacional que se ha aglutinado alrededor de AMLO a lo largo de 5 años de comunicación democrática y patriótica.
Fue acertada la modalidad de elección interna de los partidos de izquierda integrado por PRD, PT y Movimiento Ciudadano, antes Convergencia ( a mi entender debió conservar el nombre original) para definir a su candidato. Cada precandidato propuso una empresa encuestadora, Ebrard la llamada “Nodo Investigación Más Estrategia” y López Obrador “Covarrubias y Asociados”. Y el resultado cristalino fue la victoria de AMLO con un marcador de 3 a 2, así como la inmediata aceptación del resultado de Ebrard con una, digamos, democrática caballerosidad que hace mucho se había olvidado en México si es que jamás la hubo. A ver ¿ por qué los que se dicen conservadores no han conservado esa práctica que propicia la alta política, la unión y la justicia y han actuado como placeros agarrados de la greña ? Sea como sea y ya nunca más, mexicanos, “haiga sido como haiga sido”. Hay que exigir que la elección interna de izquierda marque la tónica de la elección del año próximo. Las reglas del juego, pelados-nacos-ricos del PRIAN, ya no las impondrán y menos aún gentuza obsoleta como Antonio Solá o Dick Morris, un par de intrigantes publicistas neoliberales pagados con dinero público de los ingenuos o mejor dicho desinformados mexicanos, para tergiversar la elección 2006 con simplistas spots majaderos, mitoteros y calumniosos, como el de “Amlo es un peligro para México”. Por desgracia los más de 50 mil muertos que carga hoy México sobre sus lastimadas espaldas - y Calderón sobre su conciencia-, supieron quien ha sido y sigue siendo el peligro en realidad, además del ya no tan seguro regreso del PRI a Los Pinos, como se leyó en los rostros de sus adeptos esta semana.
POR FIN REACCIONAN
 Pero hay otros que no tuvieron que morir ni ir a dar a las innumerables “fosas de cadáveres anónimos ”, que ya no se callan ante el horror de este segundo
 “ Sexenio de la Muerte” (el primero, según el corrido de los talentosos críticos políticos, los Huracanes del Norte, fue el de Salinas). En una deleitosa nota de OEM se explica que: Los senadores acaban de aprobar en comisiones eliminar “el fuero presidencial”. Los servidores públicos, incluído el presidente, podrán ser sujetos a proceso penal sin ser privados de su libertad ni separados de sus cargos. En caso de ser declarados culpables, dice la nota, serán removidos y sometidos a la condena que determine un juez.. Bueno aquí detengámonos. Sin duda mientras son peras o son manzanas estarán bajo la lupa, serán constantemente vigilados, para que ya no tengan chance de seguir abusando, robando y matando ¿O no?
 Para quitar el fuero a los funcionarios hay que cambiar la Constitución que los protege. Lo malo es que ya sabemos que el burocratismo si no ata de pies y manos al Legislativo, si le agarra una pata hasta que pase el peligro para el “peligro” en funciones. De modo que si no encuentran la manera de plantar una ley de emergencia para aplicarla en el caso del presidente en funciones, Calderón, se podría ir vivo al corral siendo que su administración es por desgracia la más merecedora del nombre de “sexenio de la muerte”. Si la Cocoa – qué sentido del humor tiene cuando pide “voto por voto” - hubiera podido quedarse con Michoacán, se sabría donde encontrar a su hermanito, pero hoy como son las cosas quien sabe qué puerta tendrá que tocar Felipe para escapar al castigo.
Y el último informe de Human Rights Watch produjo notas definitorias de culpabilidad gubernamental como esta:
 México, D.F., noviembre 9 (El Universal).- La política de seguridad del presidente Felipe Calderón ha fracasado, pues no ha logrado reducir la violencia, pero además ha generado un incremento drástico de violaciones a los derechos humanos, que difícilmente serán investigadas adecuadamente. Así lo indica el último informe de HRW titulado: "Ni seguridad, ni derechos. Ejecuciones, desapariciones y tortura en la guerra contra el narcotráfico de México", que José Miguel Vivanco director para las Américas de la Organización Internacional entregó este miércoles al mandatario.
El reporte agrega que al realizar un estudio en Baja california, Chihuahua, Guerrero, Nuevo León y Tabasco, documentó que miembros de las fuerzas de seguridad aplican torturas sistemáticamente para obtener confesiones por la fuerza e información sobre organizaciones delictivas. "Y la evidencia sugiere que habría participación de soldados y policías en ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzadas en todo el país", abundó. …”
EL NUEVO ACCIDENTE.
El 4 de noviembre pasado en tuiter pudo leerse este mensaje de José Francisco Blake Mora, 4º secretario de Gobernación de Felipe Calderón: “Hoy recordamos a Juan Camilo Mouriño a tres años de su partida, un ser humano que trabajó en la construcción de un México mejor”. El 11/11/11 él mismo “caía del cielo” como había predicho por broma el joven tuitero @mareoflores, 17 horas antes del suceso: "a las 11/11 les caerá un secretario del cielo". Sólo le falló el lugar, ya que no fue en Av. Reforma de la Ciudad de México sino en Temamatla, Estado de México donde se encuentra un campo militar de gran importancia.
En su declaración en la PGR adonde se le llevaron a fuerza, sin orden y con violencia 12 personas, dijo haber recordado él también la muerte de Mouriño porque entonces trabajaba a tres cuadras del lugar muy cerca de la Avenida Reforma y de Los Pinos en donde cayó el jet del 2º secretario de Gobernación del sexenio. ¿Y dicen que esto es sólo coincidencia? ¿y dicen que la muerte de Blake Mora y sus acompañantes fue otro a-cci-den-te? Pues que digan lo que digan. Los que no somos analfabetos funcionales, que leen sin entender lo que leen, podríamos pensar de manera diferente al respecto.
Por ejemplo el gran y respetado jurista y también tuitero Raúl Carranca y Rivas (@raulcarranca ) escribió el 17/11/11 un artículo elocuentemente intitulado “Nubosidad” en algunos medios y de plano en otros: “¿Fue nubosidad atmósferica o política?” “ La muerte del secretario Blake Mora y de sus acompañantes no fue un accidente” Y ofrece la definición de la Real Academia de esa palabra tan grata al gobierno: “Suceso eventual o acción de que involuntariamente resulta un daño para personas o cosas “. En su escrito recuerda naturalmente a Mouriño y a Ramón Martín Huerta, otro panista foxiano que pereció igual en un helicóptero. Y tras enumerar todas las circunstancias políticas que nos impiden aceptar lo del “accidente” da una serie de definiciones semánticas muy pertinentes que exhiben al abogado Calderón como un redomado ignorante o mentiroso: Le explica su equivocación jurídico-lingüística cuando contesta el reporte de Human Rights Watch así: “La principal amenaza para los derechos humanos de los mexicanos son los criminales, son ellos mismos quienes violan de manera sistemática las garantías fundamentales de los ciudadanos y sus familias”. NO ES CIERTO, refuta Carrancá, porque los criminales no pueden violar derechos humanos ni garantías, LO QUE ES EXCLUSIVO DE LA AUTORIDAD EN EL ABUSO DE SUS FACULTADES.
De modo que si el genocidio se basa en una errónea interpretación del presidente espurio, nunca se la va a acabar si le hacen un juicio algún día, ahora que los senadores están dispuestos a retirarle el fuero a los funcionarios “el presidente incluído”.  Vamos bien hacia la justicia. Pero habría que solicitar la verdad a nombre de todas las víctimas de este nuevo “accidente” de un viejo helicóptero que “no estaba en condiciones de volar”, según le dijo el copiloto a su hermano con anterioridad y que se elevó en una día de tal nubosidad atmósferica y política, como dice Carrancá y Rivas. ¿ Con el permiso de quién?